La silla Windsor toma su nombre de la ciudad inglesa del mismo nombre, donde se originó a principios del siglo XVIII. Se hizo la silla de jardín más popular de país, y pronto fue utilizada tanto en interior como en exterior, por bares, bibliotecas y viviendas. El estilo de la silla Windsor se reconoce por sus formas redondeadas. Completamente fabricada en madera, cuenta con un asiento macizo muy cómodo, debido a su vaciado a mano, y su respaldo está formado por barrotes verticales insertados en el asiento, acabado por un arco de madera curvada, o recta, según el modelo. El estilo Windsor se aplicó también a sillones, mecedoras, taburetes o mesas. Actualmente, podemos encontrar dos tipos de sillas Windsor. Las primeras, mas, clásicas, mantienen sus líneas curvas y tienen un acabado rústico en madera de color natural. Mientras tanto, las segundas, cuentan con un diseño más modernizado, en el que se aprecia una mayor cantidad de líneas rectas y se amplía la gama cromática de la silla.